no tengo tiempo para pensar...
y ya van 2 fines de semana que cuando paro,
pienso,
y cuando pienso, lloro...
Me cuestan las tardes de sábado en lo centros comerciales,
(demasiadas familias),
poco a poco...
Adoro los domingos en casa, de cocinas, de fórmula 1, de siesta, de merienda...
Me cuesta la comida con los suegros, me roba tiempo para organizar bien mi semana, y me roba tiempo de uno de mis dos días libres...
Adoro dormir hasta que el cuerpo pida...
Me voy acostumbrando a mi nueva etapa...
Con esfuerzo pero entregada,
cansada pero atenta,
realista y con un plan...
Ahora tengo que mirar por mi de otra manera,
ahora tiro, tiro y tiro,
y ya sé quién soy, dónde voy y con quién...
Los años y las experiencias no han pasado en balde...
Una vez más he caído,
y una vez mas me he levantado...