Muchas ya sabéis que los tratamientos no pasan por nuestra
vida sin dejar su huella en nuestro cuerpo y en nuestra alma…
En mi caso nunca han sido las huellas que yo hubiera
querido, las de dos pies desnudos y pequeñitos…
Por ello, sabiendo lo que se me echa encima voy a hacer un
ejercicio de reflexión compartida. Más o menos en un mes, habrá acabado el
tratamiento.
Pase lo que pase hay cosas que no quiero olvidar...
- Gracias a mi familia, sé que la familia es para mí un valor superior a
cualquier valor, con normas de incondicionalidad absoluta no aplicables a otros
ámbitos... Yo siempre estoy para ellos y ellos siempre están para mí.
- Hay y ha habido en mi vida grandes personas. Obviamente tener por compañero
de vida a mi marido y mejor amigo es una de las cosas en que la realidad ha
superado a los sueños.
- Hay, y gracias a él sé, que siempre
habrá en mi vida un perro. No puedo describiros lo que es vivir con
un perro, hay que tener la experiencia...Me quedaría corta aunque escribiera un
millón de palabras...
- Hay una colección de música, libros y películas y series que siempre me han gustado, y a lo largo de
mi vida voy encontrando tesoros que pasan a formar parte de esta selecta
colección. Películas que siempre puedo
ver, libros con frases que podría haber escrito yo, series que me embarcan en
maravillosos mundos que habito por 40 minutos, y canciones que sin filtros van
directas al fondo de mi alma...
- Estudié por vocación una carrera de las que me advirtieron que es de las de
pocas salidas laborales. Así lo ha sido... No me arrepiento de ello. Al
principio tuve que trabajar de otras cosas, cuando pude pagármelo me
especialicé y gracias a ello pude por primera vez trabajar de ello... No
abundan las ofertas, pero he podido tener diferentes experiencias laborales que
me han aportado lo indecible, no hay palabras...
Si dentro de un mes mi vida sigue siendo esto mismo y nada ha cambiado, y tras
próximos intentos sigue siendo más de esto mismo, mi carrera vocacional y el
autoempleo podrían ser el proyecto al que dedicara mi vida...
Me ronda esa idea...
Todo empieza en una idea...
- Soy una persona sensible, a la que le llena ayudar a los demás, algo
introvertida con mis cosas, a la que le gusta aprender cosas nuevas (tengo
listas con cosas que quiero hacer "algún día"), que se adapta rápido
a lo que toca en cada momento, muy planificadora y organizaba, una incansable
buscadora de equilibrios, y tenaz y persistente pero a mi ritmo...
- Tengo mucho gusto por la ropa, perfumes, cosmética y adornos del hogar, y
antes dedicaba dinero a éstas cosas, ahora el gusto sigue en mí, pero han
pasado a un plano secundario...
Los precios de los tratamientos, medicación, las pruebas , y ahorrar por lo que
pueda pasar tienen prioridad máxima. Cada momento tiene sus prioridades.
Y todo esto pase lo que pase dentro de un mes... seguirá conmigo... (eso espero…)
Obviamente si esto me hubiera parecido suficiente no hubiera
empezado nunca éste camino de buscar más… Pero esto es hoy por hoy lo que hay,
y lo que ha habido estos últimos años, y quizás lo que siga habiendo… Y lo
valoro, lo agradezco, lo reconozco… Nunca intento perder esto de vista…
Un regalito para vosotras por estar ahí… Un ramito de
margaritas cogidas ayer… Quizás la vida
no nos da lo que queremos, pero nos da otras cosas…